CERVEZA Y LAS ECV

Recientes estudios afirman que consumir una pequeña dosis de cerveza diaria ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares (ECV) así como diversos tipos de cáncer, tales como el cáncer de mama o la leucemia. Además se ha demostrado que incluso se podría añadir a dietas especiales para deportistas debido a sus características organolépticas y su baja gradación (4-5º), ya que puede ser beneficiosa para la rehidratación de los deportistas. El secreto radica en que las bebidas fermentadas ricas en polifenoles, como la cerveza, tienen un mayor efecto protector que las destiladas así como efectos antiarterioescleróticos, antiinflamatorios y antitrombóticos debido precisamente a esos beneficiosos polifenoles, al aporte necesario de ácido fólico (que previene el cáncer de mama) y al xanthohumol (un antioxidante). Según el estudio realizado en 1.249 sujetos con alto riesgo vascular, aquellas personas con un consumo ocasional presentaban un patrón alimentario más sano, próximo a la dieta mediterránea, que los sujetos que no consumían cerveza. Estas evidencias científicas se sustentan en un consumo moderado de más o menos una o dos cañas diarias.

Julián L., Javier D., Thor M.